¡Hola a todos!
Hoy desperté con ganas de dedicaros otra canción. Esta va especialmente dirigida a todo el movimiento estudiantil. Debemos seguir luchando por una educación digna, por buena formación para nuestros profesores y por el fin al lucro. Esta reforma, como todos sabéis, seguramente no nos beneficiará a nosotros, pero esto es una apuesta a futuro. Sigamos firmes con movimientos pacíficos y culturales.
La cultura es un ámbito que se ve a menos en Chile. La minoría de los fondos van a la cultura. Debemos demostrar al mundo que el cambio es posible. Desarrollo no significa solo crecer económicamente, sino que en todo sentido. Han dejado olvidado al país como personas, como sociedad, y se han centrado en el dinero. ¿Hasta cuando va a durar esto? No al lucro. Sí al buen repartimiento de fondos. No a la corrupción. No más políticos inútiles, poco serios. ¿Como vamos a confiar si la mitad de los que están relacionados a la política tienen todo el dinero del país en sus bolsillos, y la otra mitad son familiares? A veces da la sensación de que seguimos en la Edad Media, y que los que hablan son unos pocos. Debemos demostrar que esto no es así.
We gotta take the power back.
Otro tema que me indigna es la iglesia. ¿Porqué la involucran en todo lo que pasa en Chile? Ya no vivimos subyugados al poder de otros. ¿Porqué creer en su ayuda, después de tanta mentira, de tanta represión, de tanto mal? Pensad por vosotros mismos. Romped vuestras burbujas. Salid de la creencia ciega y armaos vuestra propia opinión. Simplemente, me cuesta creer que haya gente que haya apoyado a Karadima. ¿Como puede ser que haya gente tan ciega? No somos un rebaño que debe seguir a un pastor, a un cura, a ninguna entidad. Hoy en día hay tantos medios para informarse, que cualquiera puede formarse una opinión propia. No quiero escuchar más de ella. No necesitamos a nadie para hacer el bien, solo a nosotros mismos. No necesitas que te digan que debes seguir diez frases para hacer el bien. Hazlo por ti, simplemente. Por ti y por el resto del mundo, no por una entidad, y menos una que es una gran mentira, y que lo que busca es dinero.
Finalmente, me gustaría acabar con un pequeño párrafo referido a los medios en Chile. Para comenzar, si veis la televisión chilena, no os creáis la mitad, y la otra mitad dudadlo firmemente. El nivel de censura, de mentira y de poca seriedad que han alcanzado los medios hoy en día es, a lo menos, indignante. El periodismo televisivo y en los diarios ha dejado de serlo, y ha pasado a ser una herramienta de control social. De los que habéis ido a las movilizaciones, ¿cuántos no os habéis indignado de ver que, según medios, fue un décimo de la gente que visteis? ¿Cuántos no os habéis indignado al ver que, según medios, las marchas fueron solo destrozos, siendo que estuvisteis allí, y visteis que fue una bella marcha pacífica la mayor parte del tiempo? ¿Cuantos no os habéis indignado viendo que, en vez de explicar lo que está pasando en el mundo, nos ponen como noticia "el pollo con papas en Chile"? No creáis lo que dicen los medios. Son descarados los intereses que hay insertados en ellos, son como piojos en lo que podría ser una bella cabellera. Nosotros podemos cambiar esto. Debemos cambiarlo. La mitad de Chile no sabe lo que realmente está pasando. La mitad de Chile honra a gente que domina por encima de los demás, sin siquiera tenerlos en cuenta. Acabemos con esta ignorancia.
Seguramente habrá algún idiota que me llame "comunista" después de leer esto. Otro me llamará "anarquista". Yo estoy más allá de corrientes políticas. Yo soy simplemente una persona que quiere un cambio. Quiero que se acabe el control de los pocos. Quiero vivir en una sociedad más justa, donde todos nazcamos con las mismas probabilidades de salir adelante. Quiero que se acabe el poder heredado, y que comience la era del poder logrado por reconocimiento. Quiero que los que dirijan sean los inteligentes, los justos y los bondadosos, y claramente no me refiero a ninguna deidad, sino que a personas. Sé que las hay. Debemos luchar por el bien de todos. Se acabó el rebaño, el tirarse por un barranco y que todos te sigan. Se acabó el llenarse los bolsillos sin dificultad. Se acabó el monopolio de los pocos, y comenzó la opinión pública. Se acabó la manipulación social. Debemos tomar las riendas del asunto.
Chile somos todos, no el 5%.
¡Fuerza!
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